Sin vendas: la mujer bajo la mira del hombre | "La intrusa" y "Cambio de Luces"

Sin vendas: la mujer bajo la mira del hombre

"La intrusa" de Jorge Luis Borges" y "Cambio de Luces" de Julio Cortázar

Leonela Juarez

        La literatura siempre ha sido un espejo de la sociedad, reflejando las dinámicas y las relaciones entre diferentes grupos de personas. En los cuentos "La intrusa" y "Cambio de luces", se aborda la figura femenina y el modo en que es tratada por los hombres y una sociedad patriarcal. A través de estos relatos, Cortázar y Borges nos invitan a reflexionar sobre el papel y la percepción de las mujeres en un contexto social y cultural en donde la mujer se corre a un lado.

        "La intrusa" trata sobre la historia de como dos hermanos "comparten" a una mujer, hasta tal punto que afecta el vínculo de ambos y deciden matarla para que deje de ser intrusa en la relación. En este cuento, el personaje de Juliana Burgos no es más que un objeto para ellos: "Es verdad que ganaba así una sirvienta, pero no es menos cierto que la colmó de horrendas baratijas y que la lucía en las fiestas.". Cristian, quien fue el primero en estar con ella, se la "presta" a su hermano Eduardo como si fuera un juguete: "Cristián le dijo a Eduardo: -Yo me voy a una farra en lo de Farías. Ahí la tenés a la Juliana; si la querés, usala."

        En "Cambio de Luces" la cosificación de la mujer no es tan evidente como en "La intrusa" pero si se hace presente un aspecto de ella. El narrador, Tito Barcárcel, piensa de una manera a Luciana, la chica enamorada que le escribía cartas. La imagina con ciertas características: "...esa mujer que imaginaba más bien chiquita y triste y de pelo castaño con ojos claros..." y cuando al conocerla se da cuenta que es diferente, empieza a sugerirle que cambie ciertas cosas como su pelo. El detalle más importante es cuando transforma su sala de estar para que al ella sentarse en el sofá, él pueda ver la imagen de chica triste que se había imaginado. Con esto pienso que Cortázar nos quiere revelar como el protagonista se enamora de la idea de Luciana, no de la verdadera ella. Daba igual su personalidad y los detalles que tenía hacía con él, Tito nunca podría sacarse de la cabeza a la mujer que imaginaba y no podría amar verdaderamente a Luciana hasta convertirla en ella.

        En definitiva, en ambas historias la mujer se pone a un lado y se vela siempre en el interés del hombre, se hace con estas dos chicas lo que se les antoja. Así como a Juliana se la quieren prestar entre ellos, a Luciana se le quiere cambiar toda la apariencia, y con esto no dejan de ser vistas como un objeto. La cosificación se ve así ¿o a caso hay que decir literalmente que es un objeto para que se entienda? Considero necesario que se quiten las vendas para poder apreciar el trato que las mujeres reciben, en este caso en ambas historias. La mayoría de las mujeres en algún momento nos sentimos usadas, ya sea por cómo nos vemos, o por simplemente ser mujeres, y el hecho de que dos autores reconocidos mundialmente decidan prestarle atención a esta problemática me parece sumamente relevante. 

Analogía

Cita

Pregunta retórica
Generalización